jueves, 30 de octubre de 2008

ESPERANDO


Estamos maese Palillo y el que esto escribe en un brete parecido, yo aguardando la visita de la cigüeña ya mismo y el gran Santi de gira americana esperando convertirse en el abuelo más ye-ye del atletismo popular patrio. Desde el mismo Chicago me manda recuerdos, haciéndolo a su manera, peculiar e inconfundible. Aún debe de estar dando explicaciones al tipo al que le pidió el cartel para la foto. Genio y figura.

Eso, que llevo una temporada alejado de muchas cosas, y entre ellas esta bitácora. Ando un poco absorvido por los acontecimientos, que a mi ya de por sí llena vida de currante amenazado por la recesión le debemos añadir el tiempo y energía que empleo en superar esta tensa espera. Carlota se toma esto de nacer con calma. Debe estar muy cómoda dentro de su madre, aunque ésta, mi santa, no comparte tanto bienestar, antes todo lo contrario. Además los controles médicos son ahora mucho más frecuentes, y entre clases de preparación del parto, sesiones de monitorización fetal, visitas a la comadrona, al anestesista, al tocólogo y a su puñetera madre cualquiera encuentra un ratito para uno mismo.

Correr, lo que se dice correr, corro poco. Aún así, seguro que junto tres salidas por semana, que no está nada mal. El 10 de noviembre empiezo a preparar el maratón de Barcelona. Elegí esta carrera por la facilidad logística que representa el desplazamiento de la tribu entera a la que hasta hace unos añitos era mi casa. Con la excusa de ver a la familia mi santa traga y viaja sin rechistar al maratón. Además será el primer maratón de Carlota, que si todo va bien cruzará conmigo la línea de meta, en lo que representa un añadido de ilusión personal por esa carrera.

En otro orden de cosas, los muchachos de eBay me hicieron llegar ayer el nuevo Forerunner. A su hermano mayor lo perdimos para la causa un desdichado día de verano. Todo este tiempo de penitencia he tenido que recurrir al viejo Casio y a mucha imaginación para dar un perfil científico a mis entrenamientos. Finalmente, desoyendo los consejos de Solbes en cuanto a restricción del consumo, me he dado el capricho de reparar la pérdida, no sin antes jurarle a mi santa que me convertiré en el hombre más austero del país durante los próximos 20 años.

Vamos a ver cómo se lleva el Fore con los biberones. Sigo esperando.

Salud y buenos rodajes a todos.

martes, 21 de octubre de 2008

CURSA DE FONS DE SANT LLUÍS

Los pasajeros del seat panda, en el último de los avituallamientos, rehidratándose. Foto gentileza de Julio, Margarita y Fonso.

Cerramos el verano con las zapas en los pies. El Club de Atletismo Crismar Sant Lluís organiza su tradicional carrera de fondo. Son 11 kilómetros que discurren en su práctica totalidad por caminos rurales. Incluso hay que sortear un barranco, lanzándose uno piedras abajo y casi escalando la parte final del mismo. En definitiva, un recorrido precioso y con su puntito de dureza.

Salimos cuesta abajo, con las fuerzas intactas y el ánimo por las nubes. Todos salen igual que yo, razón por la cual los rápidos yendo rápido enseguida se destacan de los lentos que van rápido. La carrera se corta en menos que canta un gallo, y formamos un bus de cola de 5 unidades que pronto termina convertido en poco menos que un seat panda con tres pasajeros: Julio, Margarita y el que esto suscribe, lo que representa mi oportunidad para disfrutar de su compañía, habida cuenta de que no pude asistir a su triunfal entrada en meta en el medio maratón.

Los primeros kilómetros son suaves, y me da que el seat panda circula un poquito acelerado. En las primeras cuestas constatamos que es así: Margarita sugiere que saltemos en marcha del coche y nos vayamos con viento fresco porque ella pretende terminar sin perder el resuello en el intento. Julio ni se lo piensa, porque le dijo en su día al cura que para lo bueno y para lo malo hasta que la muerte les separase. Yo lo valoro, pero decido seguir con ellos hasta el final ante la perspectiva de terminar un poquito antes y correr sólo el resto de carrera. Me tomo el tema con un poquito de calma y procuro disfrutar más del paisaje y de la compañía.

Con esfuerzo superamos las primeras rampas, el barranco, el avituallamiento y las últimas cuestas que llegan hasta el kilómetro 9. De ahí al final, 2 kilómetros suaves para aparecer de vuelta en Sant Lluís, cruzar con alegría la meta y disfrutar de la cervecita que nos espera.

Total, una jornada magnífica, con un clima suave aunque algo húmedo, una carrera ni corta ni larga, un circuito hermosísimo y la mejor de las compañías. ¿La marca? ¿De verdad importa? Bueno, hora y pico, y más hubiéramos disfrutado si hubiésemos tardado más.

Salud y buenos rodajes a todos.

viernes, 10 de octubre de 2008

POR FIN... MEDIO MARATÓN DE MENORCA 2008

No es normal aparecer con la monserga de una carrera corrida un domingo al viernes siguiente. Se pierde el interés propio de la inmediatez, las sensaciones se diluyen y se cuenta todo con mucho menos "feeling". De todos modos no me queda otra, o sea que ahí va...

Puede que para mí no fuera la carrera perfecta, ahora que tan de moda está esto de bailar en el filo de la perfección, pero estuvo muy bien. No tenía demasiadas referencias válidas sobre cómo salir, más allá de recurrir a mis más hondas convicciones y tratar de terminar sin morir en el intento. Además, la declaración de fallecimiento que pesa sobre mi forerunner por pérdida irreparable y ausencia reiterada de noticias me ha dejado todo este tiempo sumido en la más profunda inopia y ha convertido mis entrenamientos en algo poco o nada científico. Por todo ello me pareció que pasando cada kilómetro más o menos en 6'20" llegaría dignamente al final. Aún así, presumía que el último tramo se me iba a hacer un poco largo. Mi última marca en la distancia era 2 horas 16 minutos, en Denia, este mismo año.

Pues eso, salgo con Richy y el resto de mediomaratonianos con la alegría propia de esas cosas buenas que sólo suceden una vez al año. ¡Uys, Richy! Se trata de un graaaan amigo, de esos de casi toda la vida. Decidió dejar de ser gordo. 16 kilos después decidió ser mediomaratoniano. Salimos juntos y a los 800 metros se larga diciendo que se encuentra la mar de bien. El muy cabrito terminó en 1:44 con una sonrisa de oreja a oreja. Es el de la primera foto (el otro soy yo, para los menos versados en slowpepismo).

En el primer punto kilométrico mis planes se habían ido tras los de la élite. Lo paso en 5'45" y me acojono, porque eso para mí es poco menos que volar. La euforia, que no sabe de ritmos. Echo el freno y recupero en control de la situación. Para entonces ya troto con Lisa, otra debutante que se sube al bus de salida. Enseguida nos alcanza Raúl, otro que se desvirga en esta carrera. Ha salido despacito delante de la ambulancia porque no las tiene todas consigo. Él va a correr de vez en cuando, y un amiguete le lió para esto de los 21097. El amiguete también está con nosotros. Agarro el metrónomo y clavamos 6'20" (es un decir) hasta que nos dobla Fiz. El circuito es un 8 con la Plaça des Born enmedio (desde ahí todas las fotos), al que se le dan 3 vueltas, pasando por meta a la ida y a la vuelta en cada giro. Espectacular para los acompañantes, que te ven un montón de veces durante la carrera. El problema para el bus de cola es que te doblan. Pues nos dobla Fiz y el amiguete de Raúl se va tras él (literalmente). Le perdemos de vista y termina en 1:43, el muy...

Seguimos controlando. Donde deberíamos sentirnos cada vez un poquito peor nos sentimos cada vez un poquito mejor. Eso dice al menos el reloj, donde los kilómetros empiezan a caer en 6'16", 6'13", 6'08" y 6'07". Estamos más allá del 16 (Lisa nos mandó a tomar viento en el 9, recuperó su ritmo inteligente y terminó feliz en 2:20). Me parece que Raúl empieza a notar el kilometraje (prometía irse en la segunda mitad si se encontraba bien, porque es manifiestamente más rápido que yo, pero ha cambiado de opinión). Yo ando fresquísimo, y me dedico a animar a mi compañero (ya rodamos solos, nadie más nos dobla, el circuito es prácticamente nuestro). Sin comerlo ni beberlo pasamos el 20 en 5'46" y el 21 en 5'42" (¡lo que hacen las ganas de terminar!), cruzando la meta la mar de felices en 2:11, todo un éxito.

Un 10 al ambiente y otro 10 a la organización. Falló la animación fuera de la plaza, pero el problema es de cultura deportiva y tiene difícil solución. Siempre comparo esta carrera con la de Almansa. Aquí todo sale tan perfecto como allí, pero en Almansa el pueblo está en la calle y eso convierte a su carrera en prácticamente insuperable. Quitando eso, lo dicho, esto es para verlo. Enhorabuena a Mito y a todo su equipo.









Añado, el sábado 11 de octubre: Cometo un olvido imperdonable al no acordarme de todos aquellos con los que compartí entrenos para esta carrera, y que tan generosamente me hicieron partícipe de sus ilusiones de debutantes. Richy, Pere, Lisa y, muy especialmente Julio y Margarita, entrañables amigos con los que he compartido un verano de carreras y de cuyo éxito en la empresa de cumplir con sus ilusiones mediomaratonianas me alegro tanto o más que si fuera el mío propio. Parafraseando a algún amiguete de por ahí, "donde hay un deseo hay un camino". Que todos esos sueños sigan cumpliéndose.

sábado, 4 de octubre de 2008

COSAS DE LA FAMA

Anoche tropecé con un par de tipos la mar de agradables que me reconocieron. Supongo que eso de tener un blog de atletismo y colgar en el ciberespacio fotos y crónicas tiene estas cosas. Te expones a que te paren por la calle y te pidan desde fotos a consejos, y algún autógrafo que otro. A mí me da un poco de apuro tanta notoriedad, porque creo que cualquiera que se calce unas zapas y salga a correr tiene tanto mérito como los demás, aunque el reconocimento nos lo llevemos unos pocos (y perdonad la inmodestia).

Bueno, a lo que iba: estos dos compañeros (porque todos somos compañeros al fin y al cabo) me contaron que también corrían, que habían hecho incluso algún maratón, aunque fueron muy discretos cuando les pregunté por sus resultados, contestándome que la posición no importaba, que lo realmente relevante en esto de correr era disfrutar del camino. Pensé que en el fondo eran como yo, y acepté con mucho gusto cuando me pidieron encarecidamente una foto. Abel y Martín, creo que dijeron llamarse. Nada oye, ahí van las fotos y fue un placer.


PD.: Por si alguien anda aún despistado, en el texto no hay ni una sola verdad. Lo único cierto son las fotos que pude hacerme con estos dos mitos del maratón. ;-)

miércoles, 1 de octubre de 2008

FIN DE SEMANA PINGÜINO EN IMÁGENES

Todo empieza en la carrera final de la Lliga de Curses Populars, en Es Migjorn. Se celebra ahí por ser la localidad con la carrera más concurrida del verano. Salgo con Julio, tranquilito y a disfrutar. Al doblar la última esquina sé que llevo a Rafa 15 metros por delante. Decido seguir tranquilito y entrar en meta como de costumbre, celebrando el haber participado.

Doblo la esquina, veo a Rafa y sin pensarlo me voy a por él. Disputamos un sprint tan apretado como divertido (ver sino los caretos de ambos). Tengo la sensación de haberle ganado pero el chip dice que no. Lo importante es que con todo ello nos reímos un montón.
Al día siguiente tocan generala en la Plaça des Born de Ciutadella otra vez. Sigo de guía en el grupo de entrenamiento que cierra la sesión. Nos citamos unos cuantos, y eso que son las ocho de la mañana de un buen domingo.

Desde luego, esto de los entrenamientos es todo un éxito. En el bus de cola empecé más sólo que la una, pegado a los de 5:00-5:30, y esta vez conseguimos ser hasta 10 pasajeros. Hoy conduce Marina, una jovenzuela que empieza sólo por un ratillo y decide terminar los más de 14 kilómetros. Nuestro ritmo tortuguil invita.

Las 10 unidades dando lo mejor de cada una casi al principio del entrenamiento, con las piernas frescas y el ánimo intacto. Lo segundo no va a variar en toda la sesión. Lo primero,... cada uno se sabe lo suyo.

Aquí arriba queda clara la insubordinación del grupo. Si es que uno no tiene ya autoridad ninguna, y el ritmo lo marca cualquiera, dejando al guía para los chistes y poco más. Suerte que iba Marina controlando el cotarro.

Bueno, a veces hay que tirar del carro. En las caras del personal se observa con claridad el sufrimiento a que nos sometimos por espacio de hora y media. Si es que todos los corredores somos iguales, y nos va la matraca.

El domingo es el medio maratón. El objetivo es correrlo, tal como suena. Estoy ya muy mayor para pensar en otras cosas, al menos de momento.
Salud y buenos rodajes a todos.